Un año más, coincidiendo con las fiestas de Santa Eulalia, varios espacios de Ciutat Vella se transforman gracias a las originales instalaciones lumínicas creadas por alumnos de las escuelas de diseño, iluminación, arte y arquitectura.
Empezamos el recorrido en La Pedrera, en cuya fachada se proyectó Moviments Granados, un espectáculo de música en directo y vídeo.
Con motivo del centenario de la muerte de Enrique Granados, un grupo musical interpretó varias piezas del compositor desde los balcones del edificio.
Durante tres noches, patios y fachadas se iluminan y transforman para celebrar la Fiesta Mayor de invierno, en honor de Santa Eulalia, copatrona de Barcelona.
Las farolas de Ciutat Vella se engalanan de rojo, plata o dorado para mostrarnos los 3 itinerarios a seguir.
En la plaza de las Beatas, Carolina y Ferran, unos graciosos cabezudos muy parlanchines se iban transformando y cambiando de color gracias a un original juego de proyecciones.
Estos son algunos de los patios transformados:
Patio del Palau Mercader, sede del Cercle Artístic de Sant Lluc: Path box (caja de ruta)
Patio de la casa Padellàs: Incomoditat sensorial, un juego de aspas girando a gran velocidad.
Patio de la Casa del Ardiaca: Spatium fugit, un paisaje de esferas de luz en constante movimiento.
Patio del Museo Frederic Marès: Dins l'univers.
Multitud de pequeñas estrellas brillando en la oscuridad nos dan la sensación de estar en medio de una constelación.
Patio del Archivo de la Corona de Aragón: Bany de roig.
Todo el espacio, incluido el público, se veía teñido de rojo.
Patio del Palau Bru, sede de la SGAE: Muralla al mar.
A través de unos agujeros de luz y color podían verse imágenes de la antigua muralla que separaba la ciudad del mar.Pati Llimona: Moenia (en latín "paredes de una ciudad"), juegos de luz blanca proyectados sobre los restos de la gran muralla romana.
Patio del Palau Centelles: Alétheia (en griego, "verdad", hacer manifiesto lo que está oculto). Aquí la luz, contenida en volúmenes opacos, se escapa al exterior por varias rendijas.
Patio del Palacio del Marqués de Lió, sede del Museo de las Culturas del Mundo: Anhel, una red de la que cuelgan pequeños espejos triangulares que brillan como estrellas. La luz, la música y la danza evocan la leyenda de Santa Eulalia.
La Casa dels Entremesos: A cor obert, bombillas de color que se encienden y apagan al ritmo de los latidos de nuestro corazón.
En la plaza de la Mercè: Iglú de vent, juega con la luz, el color y las sombras en movimiento.
Fachada y cúpula de la Mercè iluminadas |
En la plaza de Sant Felip Neri: El balcó dels somnis, un original mapping, hecho a mano, en el que se mezclan las imágenes proyectadas sobre la fachada y la danza real de una bailarina en busca de su sombra.
En la plaza de Sant Jaume: Dansem amb la llum, una coreografía en la que doce péndulos lumínicos, varios proyectores láser en las fachadas del Ayuntamiento y el Palau de la Generalitat y máquinas de humo crean una atmósfera mágica de luz, color y movimiento
Y para acabar, en la plaza del Rey: Axioma, un mapping en 3 dimensiones, para el que hacían falta unas gafas especiales.
Una interpretación de la geometría con puntos, rectas, planos y volúmenes que proyectados sobre la fachada nos llevan a un viaje fascinante.
Si quieres ver las iluminaciones del año pasado clica aquí.
LLUM BCN 2015.
Maite, interesante tu recorrido. Un saludo
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